Agua caliente sanitaria y tecnología de piscinas olímpicas
En 1968, Wilo presentó un perfeccionamiento de las bombas circuladoras de calefacción para el uso en sistemas de agua caliente sanitaria y, además, creó un departamento completamente nuevo dedicado a la tecnología de las piscinas olímpicas.
A partir de la bomba circuladora de calefacción, Wilo diseñó una bomba de rotor húmedo para el suministro de agua caliente sanitaria. Esta bomba de circulación sirve para transportar el agua caliente a las tomas de abastecimiento (como duchas, lavabos o fregaderos). Para que la bomba pueda cumplir su papel, es necesario crear un sistema de circulación para el agua caliente sanitaria. Es decir, de forma similar a lo que ocurre en una instalación de calefacción, es necesario contar con un anillo de tubo que pase lo más cerca posible de las tomas de abastecimiento. A continuación, en este circuito la bomba hace circular el agua potable (caliente) almacenada en un acumulador para que el agua caliente esté disponible lo más cerca posible de las tomas de abastecimiento (y, por lo tanto, rápidamente). De este modo se reduce el consumo de agua y, al mismo tiempo, se gana en confort.
Para seleccionar las tuberías y las piezas de la bomba que entran en contacto con el agua, uno de los parámetros más importantes es el pH del agua. Una dureza de agua demasiado baja provoca corrosión en las tuberías metálicas y en los componentes mecánicos de la bomba. Un agua demasiado dura puede hacer que se acumulen depósitos de cal en el sistema de almacenamiento de la bomba, lo que provocaría bloqueos. El pH del agua potable se encuentra normalmente entre valores neutros y ligeramente alcalinos, un pH de entre 7,0 y 8,5. Por este motivo, el reto de los desarrolladores de Wilo consistió en encontrar materiales óptimos para este intervalo de pH con el objetivo de evitar los daños mencionados previamente.
Asimismo, en el año 1968 Wilo volvió a reaccionar de forma proactiva ante una tendencia que empezaba a perfilarse. Muchos ciudadanos alemanes acaudalados querían construir una piscina en sus nuevas casas. Con la tecnología para piscinas olímpicas de Wilo, la empresa creó un nuevo departamento adaptado a estas nuevas tendencias. Hasta 1996 se fabricaron y distribuyeron instalaciones de filtrado de alto rendimiento para piscinas olímpicas públicas y privadas, además de accesorios como grupos de calefacción, equipos para depósitos, valvulería y productos para el cuidado del agua. Wilo no dudó en seguir trabajando en tecnologías innovadoras y, por ejemplo, en 1998 desarrolló una bomba de filtración para piscinas olímpicas silenciosa y autoaspirante con motor de rotor húmedo. Este novedoso grupo contaba con una carcasa de bomba de material sintético con filtro integrado.