El uso de la geotermia en combinación con techos termoactivos y un ingenioso sistema de ventilación es lo que más destaca de la sede central de la oficina para el desarrollo urbano y el medioambiente (BSU) de Hamburgo, además de su llamativa y colorida fachada. En los sistemas de abastecimiento de agua, calor y refrigeración respetuosos con el medioambiente, la tecnología de bombas de alta eficiencia Wilo juega un papel fundamental.
Este complejo de edificios compuesto por varias secciones no destaca únicamente por su estética. También cumple los requisitos ecológicos más exigentes y es uno de los edificios de oficinas de menor consumo de Alemania. Como consecuencia, este nuevo edificio ha recibido el galardón de proyecto de excelencia en la exposición internacional de arquitectura de Hamburgo y el certificado de oro de la sociedad alemana de construcciones sostenibles (DGNB, por sus siglas en alemán)."Bajo este exigente estándar de construcción subyace un concepto energético integral que está compuesto por la combinación de energías renovables y por una puesta en práctica consecuente de los criterios para viviendas pasivas", declara Axel Hupfeld, director de proyectos de Obermeyer Planen + Beraten GmbH. La demanda energética primaria anual de solo 58,13 kWh/m2a queda claramente por debajo de las especificaciones originales del promotor (70 kWh/m2a). También la demanda de calefacción queda por debajo de los límites máximos exigidos de 15 kWh/m2a y cumple de este modo la normativa de viviendas pasivas.
La geotermia como base de un concepto energético sostenible
Como fuente de energía regeneradora, la geotermia es la base del concepto, ya que la climatización de las estancias se lleva a cabo por medio de techos termoactivos. La tecnología de bombas de alta eficiencia Wilo contribuye a que los sistemas de calentamiento y refrigeración funcionen de forma respetuosa con el medioambiente y garantiza un abastecimiento de agua fiable para las instalaciones sanitarias.El edificio descansa sobre un total de 1640 pilotes con una longitud de 19 metros. La mitad de estos pilotes se utiliza para absorber el calor de la tierra (temperatura de la fuente: 13 °C de media anual). A través de un circuito de agua salina, dos bombas de calor de agua/agua salina abastecen el edificio de agua caliente con una temperatura de avance de 50 °C.Las bombas de calor se encargan de la carga base. Estas se operan mediante electricidad ecológica de la empresa energética Hamburg Energie, que además proporciona calefacción central para cubrir la carga punta. De este modo, las bombas de calor y la calefacción central cubren la carga de calentamiento del edificio con temperaturas externas de hasta menos de 12 °C. Además, este concepto bivalente permite la realimentación con ayuda de la calefacción central en caso de que el campo geotérmico sufra un fallo o se agote. "Evitamos una posible descarga del campo geotérmico compensando la absorción de calor del invierno con la emisión del calor que sale del edificio hacia la tierra durante el periodo estival", explica Jörn Delicat, proyectista responsable del proyecto en Obermayer.
Refrigeración de dos etapas en los meses de verano
La refrigeración se compone, por una parte, de dos refrigeradores colocados en los tejados y, por otra parte, de un campo geotérmico para cuando la temperatura del aire exterior no permita utilizar los refrigeradores.Las bombas Inline de Wilo con regulación electrónica se encargan de que los circuitos de refrigeración y de calentamiento funcionen de forma fiable y económica. En el lado de refrigeración encontramos las bombas dobles de tipo CronoTwin-DL-E; en el lado de agua salina y de calentamiento de las bombas de calor encontramos las bombas Inline VeroLine-IP-E, así como también en el circuito de glicol del refrigerador. Por medio de una adaptación de potencia electrónica integrada de las bombas de rotor seco se obtiene una elevada eficiencia energética.
Techos termoactivos para calentar y refrigerar
La climatización de las estancias se complementa por medio de dos acumuladores de calor con una capacidad de 5000 litros cada uno. Desde aquí se realiza la redistribución a los diferentes edificios con sus circuitos de frío-calor separados para los techos termoactivos en una superficie total de 22 000 m2.Las temperaturas del sistema en las diferentes partes de este edificio de cinco plantas son de 49 °C/28 °C (calor) y 14 °C/22 °C (frío) y las bombas Inline VeroLine-IP-E se encargan de la circulación. Por el contrario, los techos termoactivos del edificio funcionan con temperaturas de avance y de retorno de 32 °C/28 °C (calor) y 18 °C/22 °C (frío). Como resultado se obtiene una ∆T constante de 4 K, de modo que en ambos casos se requiere el mismo flujo másico y se puede prescindir de la conmutación de punto de funcionamiento de la tecnología de bombas que de otro modo sería necesaria. En este caso, dos bombas de alta eficiencia Wilo-Stratos generan un caudal máximo de aproximadamente 30 m3/h.En las pocas zonas sin techos termoactivos se utilizan convectores, calefacciones de suelo radiante y superficies de calefacción estáticas. En invierno también deben abastecerse los registros de tiro de los dispositivos de ventilación central para recalentar el aire exterior.
En los correspondientes circuitos calefactores operan otras siete bombas de alta eficiencia Wilo-Stratos cuyos motores EC ajustan la velocidad requerida en función de las necesidades y garantizan así una distribución eficaz del calor y el frío desde el punto de vista energético. Sobre todo en el margen de carga parcial, que supone hasta un 94 % del tiempo de funcionamiento, se logra de este modo una notable reducción del consumo energético en comparación con las bombas sin regulación.
El aprovechamiento de aguas pluviales reduce el consumo de agua potable
Los conceptos de ecología y rentabilidad también se aplican al abastecimiento de agua potable. Siguiendo las directivas para las obras públicas de la ciudad de Hamburgo, se ha instalado una red de agua fría que se complementa con una producción de agua caliente descentralizada únicamente en casos especiales. Un equipo de presión Wilo-Comfort-Vario garantiza el abastecimiento de agua potable del edificio. Para reducir el consumo de agua potable se aprovechan también las aguas pluviales que caen sobre los tejados, se depuran por medio de una instalación de filtración de tambor giratorio, se acumulan en una cisterna y finalmente se conducen a una red de aguas grises separada a través de otro equipo de presión. Las aguas pluviales se utilizan para los cuartos de baño de todas las secciones del edificio. Además, de este modo también se protege la gestión de agua sucia y de aguas residuales de todo el complejo. Aquí se utilizan diferentes sistemas de elevación de aguas y bombas de motor sumergible de aguas residuales de Wilo para que también se puedan conducir a las instalaciones de desagüe de Hamburgo aquellas aguas residuales que se encuentran debajo del nivel de anegación.
Ambiente agradable en la estancia con una elevada eficiencia energética
"La combinación óptima de las diferentes medidas hacen de la sede de la BSU uno de los edificios de la administración con mayor eficiencia energética de Alemania. Después de estar en uso durante aproximadamente un año y medio, ya se puede comprobar que los criterios de comodidad exigidos y los valores de temperatura se mantienen durante todo el año", resume Delicat. "Con ayuda de una regulación superior se garantiza una temperatura ambiente constante de 21 °C durante los meses más fríos. En verano, por el contrario, la temperatura se mantiene constante a unos agradables 25 °C."Para optimizar el potencial de ahorro energético del edificio, los responsables del proyecto también apuestan por la participación de los usuarios. Estos reciben, por ejemplo, recomendaciones sobre el uso correcto de las válvulas de ventilación. Además, por medio de un sistema de supervisión de energía desarrollado en colaboración con la Universidad Técnica Hamburg-Harburg se crean informes de consumo relacionados con el edificio y, de este modo, se fomenta la sensibilidad de los usuarios. "Los primeros resultados muestran que la demanda energética queda en este caso claramente por debajo de los primeros pronósticos proyectados. Esto también se ve confirmado por las experiencias que hemos ido acumulando durante la supervisión de las garantías", comenta Hupfeld.